El Cancionero de Turín, un maravilloso manuscrito musical

El Cancionero de Turín, un maravilloso manuscrito musical

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El Cancionero de Turín o Cancionero Musical de Turín (Turín, Biblioteca Nazionale Universitaria R.I-14) es un manuscrito musical que contiene obras polifónicas españolas de carácter profano de finales del siglo XVI y principios del siglo XVII.

Son por tanto obras de transición entre el Renacimiento y el Barroco.

Como su nombre indica, el manuscrito se conserva en Turín.

La aparición de esta colección de piezas en castellano en Turín, no es un hecho extraño, después de todo, existen varios ejemplos de “músicas viajeras” en nuestra literatura sonora, como el Cancionero de Uppsala, el de Múnich (llamado “de la Sablonara“), el de Coimbra, el de Lisboa o el romano de la Casanatense.

El Cancionero de Turín está compuesto de un total de 46 obras, escritas a dos y tres voces (tan sólo una es a cuatro), y su existencia confirma la gran difusión de la música española en la Italia de aquel tiempo.

Es un cancionero anónimo casi en su totalidad, salvo dos piezas, del guitarrista y compositor Juan de Palomares, amigo de Lope de Vega.

Es fácil pensar que Palomares sea autor de algunas piezas más.

Los textos, por su parte, están extraídos del romancero, de Lope de Vega u otras fuentes y autores diversos, respondiendo a tres formas literarias: romances, canciones y villancicos.

Madre, la mi madre (Anónimo) – “Cancionero de Turín” (S. XVI / XVII).

Intérpretes: Orphénica Lyra – Director: José Miguel Moreno.

– Nuria Rial (Soprano)
– Jordi Domenech (Contratenor)

(http://www.glossamusic.com/glossa/artist.aspx?lang=esp&id=14)

Escribe CARLOS VALDERRAMA ANDRADE [Reseña a Giovanni María Bertini, “El romancero musical de Turín”. Thesaurus: Revista del Instituto Caro y Cuervo de Colombia. Tomo XXXI (1976), nº 2]:

“La primera noticia del Romancero Musical manuscrito del siglo XVII de la Biblioteca Universitaria Nacional de Turín la dio el Dr. Carta, director de dicha Biblioteca, en la ‘Rivista delle Biblioteche e degli Archivi’ (a. VIII, pág. 42).

Bertini reproduce la tabla del Romancero (signatura, Ris. Mus. I-14), e ilustra con interesantes facsímiles su trabajo.

La procedencia del manuscrito hay que ponerla en el más antiguo fondo de la Biblioteca Universitaria, formada por Víctor Amadeo II hacia la mitad del siglo XVIII.

Parece que el manuscrito llegó a la Corte de Saboya con motivo de la permanencia en ella de Dña. María Catalina de Austria, hija de Felipe II y esposa de Carlos Manuel I.

En todo caso el Romancero Musical se hallaba ya en la Corte turinesa a principios del siglo XVII.

Bertini incluye una laboriosa bibliografía de las composiciones y, desde luego, el texto de los cuarenta y nueve romances que forman la colección”.

POR LA PUENTE, JUANA (Anónimo) – “Cancionero de Turín” (S. XVI / XVII).
(Romance).

Intérpretes: MÚSICA FICTA – Director: Raúl Mallavibarrena.

– Ruth Rosique (Soprano).
– Marta Infante (Contralto).
– Miguel Bernal (Tenor).
– Rafael Bonavita (Vihuela).
– Raúl Mallavibarrena (Percusión y Dirección).

(http://www.enchiriadis.com/#!musica-ficta/c5en)

Miguel Querol Gavaldá (“Cancionero Musical de Turín. Transcripción y estudio por Miguel Querol Gavaldá”, Sociedad Española de Musicología, Madrid, 1989) escribe:

“Doy el nombre de Cancionero Musical de Turín al manuscrito R.I-14 de la Biblioteca nacional de esta ciudad.

El primero que lo estudió, en su aspecto literario, fue Giovanni M. Bertini en su artículo “Un Romancero Musical Español en la Biblioteca Nacional de Turín” publicado en la revista AEVUM XII (1938).

Según escribe Bertini en la introducción de su trabajo, envió éste a Ramón Menéndez Pidal juntamente con la transcripción musical confiada a Eduardo Martínez Torner para publicarlo en la Revista de Filología Española, pero los sucesos de la guerra civil impidieron que la publicación fuese llevada a cabo.

Afortunadamente gracias a una copia dactilográfica que Bertini conservaba de su trabajo, pudo finalmente publicarlo en la citada revista AEVUM, la que por la misma razón de la guerra civil, no se halla el número correspondiente al año 1938 ni en la Biblioteca de la Universidad de Barcelona ni en la Biblioteca de Cataluña […] Respecto a la presunta transcripción musical de Martínez Torner no tengo otra noticia que la afirmación de Bertini en su artículo.

[…] Bertini en su citado artículo hizo un estudio muy meritorio de los textos del manuscrito de Turín, señalando algunas fuentes y variantes con respecto al texto del Cancionero.

Yo por mi parte me he limitado a transcribir el texto, que presenta algunas diferencias de lectura respecto a los textos publicados por Bertini en “Poesie espagnole del seicento” (Torino, 1946) y señalar las variantes […]

Por otra parte debo poner un serio reparo al concepto de conjunto que Bertini tiene de los géneros literarios contenidos en este Cancionero.

Bertini siempre que habla del manuscrito lo llama con insistencia «Romancero Musical» pero yo le he dado el título de “Cancionero Musical”, porque responde mejor a la totalidad de los géneros literarios contenidos en el mismo:

– Romances sin estribillo
– Romances con estribillo
– Canciones sin estribillo
– Canciones con estribillo
– Villancicos

De 46 poesías, solamente 11 son romances, por lo que considero inadecuado el nombre de Romancero que da Bertini a este manuscrito.

Todas las piezas musicales así como las poesías figuran anónimas, excepto la número 39 que lleva el nombre de Juan de Palomares.

Bertini se preguntaba si este nombre sería de un poeta o de un músico.

Hoy se sabe muy bien que Palomares era un compositor y guitarrista, amigo y admirado por Lope de Vega […]”.

Se puede acceder al listado de obras desde este enlace.

Cancionero Musical de Turin (Nº 1-49. ed. M. Querol Galvaldá)

Todas las obras son anónimas excepto dos de Juan de Palomares. Las piezas no indicadas son a 3 voces.

1. Por la puente, Juana
2. Ay malogrados pensamientos (a 2)
3. Ya no soy quien ser solía
4. ¿Qué es esto pensamiento?
5. A la gineta y vestido (a 2)
6. A Dios esperanças
7. Al enredador, veçinas
8. Ay, suspiros
9. Aquí no hay que esperar
10. Ay amargas soledades (a 2)
11. Volved, pensamiento mío
12. Bella pastorcica
13. ¿Cómo puede temer daño?
14. Con çiertas desconfianças
15. Cómo retumban los remos
16. De pechos sobre una peña (torre)
17. ¿Dónde estás, señora mía?
18. Desdichada la dama (a 2)
19. De los álamos vengo, madre
20. En esta larga ausencia
21. Fuego de Dios (a 2)
22. Gavilán que andáis de noche
23. La ocasión del mal que siento
24. Madre, la mi madre
25. La morena graciosa
26. En el campo florido (J. de Palomares)
27. Río de Sevilla
28. ¿Qué es esto pensamiento? (=nº. 4)
29. Mal haya quien s’enamora
30. No me lo pregunte, madre
31. No paséis el caballero
32. No puedo en tus ojos bellos (a 2)
33. No quiero contar mi pena (a 4)
34. Ojos, no lloréis
35. Horas tristes y amargas
36. Salte y bayle (Por dinero bayla el perro)
37. Señora, después que os vi
38. Vay os amores (a 2)
39. Sobre moradas violetas (J. de Palomares)
40. Otras veces m’avéis visto
41. Mi querido es ido al monte
42. Puse mis cabellos
43. Pensamiento, pues dizen
44. Era la noche más fría
45. Blanda la mano (a 2)
46. No lloréis, casada (a 2)
47. Bella pastorcica (=nº. 12)
48. En el más soberbio monte
49. De pechos sobre una torre (=nº. 16)

Río de Sevilla (Anónimo s.XVI)

Intérpretes: Huelgas Ensemble – Director: Paul Van Nevel.

Enlaces de interés

– Letras de los vídeos Cancionero de Turín
http://www.sedem.es/es/catalogo/producto.asp?id=128
https://es.wikipedia.org/wiki/Cancionero_de_Tur%C3%ADn

Escrito por Camilo López García

1 Comentario sobre “El Cancionero de Turín, un maravilloso manuscrito musical”

  1. Goyo dice:

    Maravilloso, es muy cierto. Y las maravillas que se debieron de perder en el incendio del alcázar de Madrid y su maravillosa biblioteca musical…
    La cultura en este país ha nacido para ser maltratada, por las autoridades, por las catástrofes, por el embrutecido pueblo… Y aun así hubo gente que dio motivos para seguir pensando que esta nación merece la pena…
    ¿Algún día dejaremos de pirrarnos por el fútbol y de escuchar chunda-chunda a todas horas y volveremos a nuestras raíces culturales? Seguramente no, pero es una bella utopía.

    Saludos y enhorabuena por el blog; no lo conocía, pero lo he metido en mis marcadores para volver a leerte de vez en cuando.

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